Orán quema la savia
de los que hecharon raíces,
su sol enciende las ansias
y les deja cicatrices.
Orán moja el alma
del que en sus ríos se baña,
sus aguas mecen las ramas
con dulce sabor a caña.
Orán llena los ojos
de aquel que admira sus tarcos,
los lapachos pintan el aire
de rosa, amarillo y blanco.
Orán canta en el oído
de aquel que se encuentra lejos
y cada Agosto los llama
para abrigarlo en su pecho.
de los que hecharon raíces,
su sol enciende las ansias
y les deja cicatrices.
Orán moja el alma
del que en sus ríos se baña,
sus aguas mecen las ramas
con dulce sabor a caña.
Orán llena los ojos
de aquel que admira sus tarcos,
los lapachos pintan el aire
de rosa, amarillo y blanco.
Orán canta en el oído
de aquel que se encuentra lejos
y cada Agosto los llama
para abrigarlo en su pecho.