Como una hoja de otoño
arrastrada por el viento
es llevado mi icuerpo
envuelto por un tormento.
Los pensamientos vaciados
palabras que ya no siento
se ha ido lo imaginado
sólo ha quedado el silencio
.
La mirada se hizo lenta
ojos que miran lamentos
llueven lágrimas y escapan
esfumándose en el tiempo.
Queda un grito contenido
atrapado en la garganta
el dolor hace su nido
y hasta la muerte se espanta.
La ausencia pone su sello
en el alma desvalida
en la memoria hay destellos
de una triste despedida.
Qué hago con esos besos
huérfanos en labios secos
si sólo tengo tu boca
que se grabó en mi recuerdo.
Manos que ya no acarician
torpes dibujan la historia
y deshojan cada día
pétalos de pasadas glorias.
Pasos cansados y viejos
que no van a ningún lado
quieren llegar lo más lejos
pero al suelo están atados.
Nada quedó...sólo nada
y este vacío que calla
se va ahondando y se calma
porque se queda en el alma